En general, las vigas de las estanterías para tarimas están disponibles en longitudes que van desde los 2000 mm hasta los 2700 mm. Las longitudes de viga más comunes son 2300 mm, aunque también hay otras longitudes disponibles. La longitud de la viga debe elegirse en función del ancho del sistema de estanterías para tarimas y el tamaño de las tarimas que se almacenan.
Por ejemplo, si los palés que se almacenan tienen una longitud de 1200 mm y se almacenan dos palés por nivel, necesitará vigas de al menos 2700 mm de largo para soportar los palés.
Es importante elegir la longitud correcta de la viga para garantizar que las tarimas estén correctamente apoyadas y que el sistema de estanterías sea seguro y estable. Si las vigas son demasiado cortas, es posible que las tarimas no estén bien apoyadas, lo que puede provocar accidentes y daños en el material almacenado. Por otro lado, si las vigas son demasiado largas, es posible que no se utilicen por completo, lo que puede resultar ineficiente y costoso.